“Lleva un tiempo que nuestras experiencias pasen por nuestra conciencia. Nuestros cuerpos son como tachos de basura: coleccionamos experiencias y de la descomposición de las cáscaras de huevo, las hojas de espinaca, las semillas de café y los huesos de nuestra mente aparecen el nitrógeno, el calor y una tierra muy fértil. De esta tierra fértil crecen nuestros poemas e historias. Pero esto no pasa enseguida. Lleva tiempo”.
– Natalie Goldberg, en Writing down the bones
Natalie Goldberg dice que nuestras experiencias van formando un compost en nuestra conciencia: es difícil escribir acerca de una historia de amor si estamos en el medio, así como es difícil escribir acerca de una ciudad a la que nos acabamos de mudar. No tenemos perspectiva. Como Hemingway, tenemos que escribir acerca de Michigan estando en París. Y darle tiempo a que el compost de vivencias se asiente y se empiece a formar un jardín. “Entender este proceso nos da paciencia y produce menos ansiedad”, dice la autora de “Writing down the bones”. Mientras esperamos, tenemos que seguir practicando nuestra escritura todos los días para poner en forma la mano y los músculos que nos hacen escribir (y así estar preparados para cuando la experiencia esté lista para pasar al papel).
hola!! asi es tal cual!! yo siempre escribo sobre alguna cuestión mucho después que sucedió. En el momento no puedo. Ahora esto en el meollo (una profe de la facu siempre usaba esa palabra y se me pegó) de una cuestión y me aconsejan: Ponete a escribir!! no puedo, vueltea, vueltea, hasta que sale… como un mini parto, tiene que esperar a madurar, pero en lugar de madurar en mi útero, madura en mi cabeza y en mi corazón. Cariños. Nat. (PD: soy seguidora fiel, entiendo ingles pero no tanto, estás manejando muchos recursos en ese idioma y está perfecto pero no te olvides de traducir, sino me pierdo algunas cosas, gracias!)
Hola Nat! dale, traduciré lo que pueda. Lamentablemente hay muy buenos recursos en inglés y no tantos en español, y a veces me olvido de que no todos lo entienden. Lo tendré en cuenta!
Genial! Me mata la ansiedad. “Quiero escribir, quiero escribir, quiero escribir…. y nunca sale nada, o nada bueno! Será cuestión de ejercitar, y esperar que ese jardín florezca. Gracias!
Al final florece cuando uno menos se lo espera! Como esas flores que de repente aparecen en nuestra ventana sin haberlas visto crecer…
Tal cual, estoy atravesando justamente un momento en el que aún no puedo describirlo, lo intenté pero aún no puedo y creo que me está sucediendo justamente eso: necesito un tiempo para vivirlo, procesarlo y luego llevarlo al papel… Tu blog de viajera me encanta porque amo viajar y es muy inspirador (de hecho creo que he leído casi todos tus post antes de salir a viajar) y éste blog creo que me gusta aún más… amo escribir y me encantan los tips e ideas que compartis para hacerlo! Ya elegí varias de tus ideas para mi nuevo cuaderno viajero y también inventé algunas derivadas de las que copié. Muchas gracias!!! 🙂
Muchas gracias Lechu, me alegra que te guste. 🙂
Y sí, suele pasar que los momentos más importantes son los más difíciles de escribir. Así que paciencia!
Pingback: "El síndrome de París", el libro que escribí en compañía de este blog | escribir.me